domingo, 7 de julio de 2013

Credo

Creo en Dios, un ser divino más allá de nuestra comprensión.
http://pinterest.com/pin/283023157803736109/

Creo en Dios, conmigo, ¡siempre!
Creo en mi luz interior que surge cuando soy armoniosa y honesta, siento que debo encontrar de nuevo mi norte, mi camino de luz, hacia el Creador.
Creo en la armonía de los seres humanos.
Creo en la bondad de los animales.
Creo en Gaia, nuestra madre tierra.
Creo en los amigos, esos que están contigo cuando la carga del mundo se hace muy pesada.
Creo en la vida, como una misión para ser cumplida y por la que rendiremos cuentas en el más allá.
Creo en el amor, como esa energía que nos conecta con seres especiales.
Creo en hacer las tareas desde la pasión, esa que hace que nos desconectemos de Cronos.
Creo en la honestidad que surge desde las pequeñas cosas.
Creo en que debo vivir bajo la paz y con liviandad para no
Amo la alegría y busco reír con las pequeñas cosas
Creo en la felicidad repartida en pequeños trocitos a lo largo de cada día.
Creo en la comunicación entre las personas y busco hacer que se entiendan entre sí.
Creo en mi potencial y confío en mis recursos. Creo que puedo reencontrarlos nuevamente si me abro lo suficiente. ¡Yo puedo!
Fui, soy y seré.

Creo en mí.

miércoles, 9 de mayo de 2012

Hay príncipes...

Hay cuentos de hadas que quisiéramos se hicieran realidad.
Hay cuentos reales que parecen de hadas.
Hay cuentos de hadas que llevan tragedias.
Hay cuentos reales que se convierten en tragedias.
Hay príncipes encantados.
Hay príncipes encantadores hasta que los pones en el mundo real.
Hay príncipes con valores.
Hay príncipes con valores aparentes y que cuando los conoces un poco se deshacen.
Hay personas que esconden un príncipe. Y lo duro es sacar ese príncipe a la superficie.
Hay príncipes intensos.
Hay príncipes que deben aprender a ser menos intensos.
Hay príncipes que son exactamente eso, príncipes. Gracias a Dios!

Imagen de Mayra Huitron

domingo, 18 de marzo de 2012

Retos

Hay ...

Retos que nos abruman
Retos que nos apagan
Retos que nos atemorizan
Retos que nos deprimen
Retos que nos asustan
Retos que te sacan lágrimas
Retos que nos sacuden

También hay...

Personas que son retos, retos que en primera instancia no sabes como afrontar y dan miedito
Personas que quieren recibir lo que tu no estas dispuesta a dar
Personas que no saben disfrutar una broma, demasiado metidas en su papel de persona seria
Personas para quienes reír como niño, esta prohibido
Personas a las cuales no deseas ayudar

Para ello son los...

Retos que nos potencian
Retos que nos dan valor
Retos que te dan vida
Retos que te dan disfrute
Retos que te dan risa
Retos que ahuyentan las lágrimas
Retos que nos liberan
Retos que nos encienden
Retos que nos dan valor
Retos que nos levantan el animo
Retos que nos retan

y...

Personas que te escuchan y te dan una palmada de cariño
Personas que siempre te apoyan
Personas que ríen contigo en voz alta, aunque sea de ti misma
Personas que te quieren
Personas que te aman

Mis lágrimas salieron, mojaron mi cara y personas que me apoyan me dieron un bastón de animo para seguir adelante.

Doy Gracias a Dios por contar con personas que me apoyan en mi caminar de la mano con los retos. Dios los Bendiga!



sábado, 30 de julio de 2011

Poema a 4 manos


Este poema fue fruto del compartir entre @DoktorVakero y @taniamorenor escrito a 4 manos.

Nuestro beso se compone de los deseos del corazón amado.
Sumados a los deseos del nuestro.
Nuestros deseos muestran el camino a nuestro beso
Y el destinatario debe mostrar también el deseo de recibirlo...
Y es nuestro beso quien vuelve los deseos, los tuyos y los mios, en amor
Besos recibidos y correspondidos son la fuente del deseo.
Solo aquellos que vuelan juntos, que coinciden en nuestro aire.
Nuestro aire da vida a nuestros besos, a nuestros deseos, a nuestro vivir.
A la tarde de siempre, para siempre, al ocaso de un principio que será nuestro mientras dure.
Para siempre me dices, para siempre te quiero, para siempre durara este ocaso del principio.
Durará lo que nuestras manos, juntas, dicten.. como la sombra de nuestras manos abrazando nuestras almas mientras pasa el sol.
También abrazare tu alma, cuando la luna nos ilumine, cuando las estrellas nos acompañen.
Siempre y cuando el espacio sea el suficiente para albergar la luna, las estrellas tus ojos y nuestros corazones...
Dudas que nuestro espacio sea suficiente para albergar este sentimiento que crece para los dos. Yo no dudo.
Dudo solo de la física que no conoce espacio mayor al infinito que guarde, como tus brazos, nuestro respirar.
Contamos con el espacio infinito reservado al amor verdadero. Ese que nace de dos almas unidas por el ideal del amor.
Contamos con la aparente incondicionalidad del ideal eterno, con el sueño de andar siempre compartiendo nuestro sueño.
Soñamos? O vivimos un sueño? Quiero vivirlo, sentir esos deseos que nos traen a la realidad finita. Compartir el aire y ...
.. al respirar saber, con certeza, que estamos juntos, a la distancia labrando futuro que nos deje amanecer...
... Amanece y las luces del alba traen a la vista de todos el amor creado desde el deseo de un beso compartido.
Doblaron juntos, por fin, la esquina. Despertaban de su sueño ella juraba un para siempre, él disfrutaba un mientras tanto...
Despertaron... Y sIguieron juntos por la playa del deseo compartido, por la playa de una esperanza no compartida...
En el horizonte de un quizá, de las necesidades satisfechas, compartidas, de las manos inseparables. De la soledad compartida... por la playa de la vida.

jueves, 21 de abril de 2011

¿ Rehuyes o aceptas el contacto físico?


Cuando hablé en otros post de conectar con los demás dejé a propósito de lado incidir en el tema del contacto físico. Y lo hice así porque es un tema que sorprendentemente resulta casi un tabú en la sociedad occidental (no conozco lo suficiente el día a día de otras culturas para poder afirmar si en ellas sucede lo mismo). Podríamos decir que hay unas áreas sociales o contactos permitidos: una madre con sus hijos -por lo menos mientras son pequeños- , en la pareja, un abrazo entre amigas, los dos besos sociales en las mejillas, etc… Pero en seguida entramos en “áreas de peligro”, es decir, en contactos que la otra persona puede vivir como excesivos o puede interpretar como lo que no son. Porque otro de los problemas que arrastramos es relacionar muchos contactos físicos y caricias con la sexualidad, cuando en realidad no tienen (o no tendrían) nada que ver.

Esta carencia de contacto físico, esa falta de sentirse cerca entre la personas hace que iniciativas que de entrada parecen extrañas tengan un enorme éxito: personas que ponen un cartel y regalan abrazos en medio de la calle o las largas colas que se forma cada vez que la india Amma visita una ciudad, para recibir de ella un caluroso abrazo. Lo mismo sucede en numerosos cursos de crecimiento personal, en que el ambiente de confianza invita a estar más próximos, a atravesar esa barrera social y poder abrazarse a los compañeros. Cualquiera que haya participado en uno de esos cursos sabrá de que le hablo y admitirá la normalidad con la que se hace. Los animales de compañía muchas veces suplen esa falta de contacto por parte de otros seres humanos.

Cuando comenté en otro post el caso de los niños en los años 50 en orfanatos, que enfermaban a causa de la falta del contacto físico, no quise insistir en la necesidad que seguimos teniendo de adultos de ese contacto. Seamos conscientes de ello o no. Dentro del sentirse querido del que hablé entonces, una parte es “sentirse tocado”. La falta de contacto físico (de momento estoy hablando de un contacto no sexual), nos debilita emocionalmente e incluso físicamente. Por nuestro modelo social, todavía sucede que los hombres suelen ser más reacios a ese contacto (sólo hay que ver como se abrazan la mayoría de ellos, dándose unos fuertes golpes en la espalda). Posiblemente no han aprendido a hacerlo y existe un cierto temor a ser mal interpretados o a sentir reacciones inadecuadas (desde la excitación sexual a sentir una excesiva vulnerabilidad). Como dijo el músico John Powell: Tengo miedo de decirte quién soy. Porque si te digo quién soy, puede que no te guste cómo soy, y eso es todo lo que tengo.

Digan lo que digan las normas sociales, necesitamos el contacto. Como dijo el Dalai Lama: El tacto es el vehículo del consuelo mutuo: para empezar, los abrazos o los apretones de manos. Y como también dice el budista Jack Kornfield: Las cosas más importantes de nuestra vida no son extraordinarias o grandiosas. Son los momentos en que nos sentimos tocados el uno por el otro. Virgina Satir (podéis encontrar un poema suyo en este post) es también una gran defensora del tacto, del contacto, del abrazo desde el corazón, como forma de conexión con los demás e incluso como parte de la terapia.

Por eso yo os invito a tocar más. En todos los sentidos. También en el ámbito de las parejas, que con los años de convivencia, en muchas ocasiones dejan de abrazarse y tocarse fuera de la relación sexual. Las relaciones sexuales son una forma de contacto íntimo (y está bien que así sea), pero no son el único lugar en donde se puede tocar y ser tocado. Todos somos capaces de saber cuál es un abrazo, un beso o un gesto de afecto aceptable en una relación social, aún habiendo personas más abiertas a ello y otras más cerradas a ese contacto. No estoy diciendo aquí que ahora tengamos que empezar a abrazar a todo el mundo que nos encontremos, sin ningún tipo de criterio. Pero sí que podemos empezar poco a poco, como recomiendo siempre hacer con cualquier nuevo hábito o conducta, a abrirse un poco más. A sustituir algunos de esos besos al aire, por un abrazo amistoso. A coger de la mano a un amigo que necesita consuelo. A besar con cariño a tus padres, hermanos, abuelos (cuánto necesitan las personas mayores que las toquen!), a tus amigos…. A acariciar también con la sonrisa y la mirada. A hacer como dijo el poeta sufí Rumi: Tu misión no es buscar el amor, sino descubrir todas las barreras que has creado en tu interior para no verlo.

¿Rehuyes o aceptas el contacto físico? ¿En que ámbitos sucede cada cosa?

lunes, 19 de abril de 2010

Me ofrezco...


Me ofrezco enseñarte a vivir cada día, disfrutando de los momentos felices

Me ofrezco enseñarte a ser, pero la decisión de ser, es absolutamente tuya

Me ofrezco enseñarte a dar, solamente lo que tu quieras dar

Me ofrezco enseñarte a disfrutar el dar, dando desde el placer

Me ofrezco enseñarte a sonreír, desde el alma

Me ofrezco enseñarte a desarrollar tu sensibilidad a la vida

Me ofrezco enseñarte a escuchar la vida, desde tu sensibilidad ampliada

Se que este planeta está lleno de seres que viven hacia el ego. Cuando te conoces a ti mismo, el ego pasa a ser parte ínfima de ti, porque 'ser tú' te guía hacia tu propia trascendencia

Me ofrezco enseñarte a vivir la vida, viviendo cada día

Me ofrezco enseñarte a vivir, viviendo.